Cada gobernante con su «pacto».
Jorge Álvarez Banderas.
El 15 de diciembre de 1987 durante la administración del presidente Miguel de la Madrid Hurtado se estableció el “Pacto de solidaridad económica” (PSE) con la finalidad de detener la escalada de intereses, la inflación y la consecuente y predecible devaluación monetaria; en 1989 ya la presidencia de la república en manos de Carlos Salinas de Gortari el pacto se refuerza y cambia su denominación a “Pacto para la estabilidad y el crecimiento económico” (PECE) para lograr más objetivos: deslizar el peso frente al dólar, incrementar el salario mínimo, congelar los precios de la gasolina, energía eléctrica y gas lp, defender la estabilidad de precios y promover el crecimiento económico, mismo que fue renovado en julio y diciembre de 1989. Frente a una severa crisis económica se estableció el “Acuerdo de unidad para superar la emergencia económica (AUSEE) a principios de 1995 y, en marzo del mismo año, se refuerza dicho mecanismo a través del “Programa de acción para reforzar el AUSEE” (PARAUSEE). Con el inicio de la administración de Enrique peña Nieto en 2012, surge el “Pacto por México”, no es propiamente un pacto económico, pareciera ser un plan de gobierno para cumplir una serie de compromisos de campaña.